La empresa Corning Inc. lanzó a mediados de este año la versión mejorada del Gorilla Glass, adelgazando en veinte por ciento su grosor, pero manteniendo su resistencia.
Se fabrica colocando el vidrio en un baño de sal fundida a 400 grados centígrados, así los iones de sodio comienzan a ser reemplazados por los iones de potasio. Al ser estos últimos de mayor tamaño, se presionan entre sí con mayor fuerza al enfriarse, produciendo una capa de compresión sobre la superficie del vidrio que la hace más resistente al daño por el uso diario.
¿Ustedes se atreverían a hacerle esto a su dispositivo móvil?