La Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO por sus siglas en inglés), afirma que actualmente el ochenta por ciento del suelo útil para la agricultura se encuentra en uso. Por desgracia, las malas prácticas de cultivo pueden llevar a reducir aún más esa cantidad de suelo aprovechable.
En contraste con esto, el número de habitantes en el planeta sigue creciendo, al igual que la demanda de alimento. Eso quiere decir que las prácticas tradicionales de agricultura, eventualmente no podrán darse abasto y que la humanidad tendrá que buscar alternativas para solucionar este problema.
Sin mencionar los beneficios que los espacios verdes significarán para contrarrestar los efectos del calentamiento global.