Las personas que practican yoga con regularidad presentan un riesgo significativamente menor de tener episodios de fibrilación auricular (latidos cardíacos irregulares) provocados por la generación inusual de señales eléctricas en el corazón. La fibrilación auricular es una causa importante de los accidentes cerebrovasculares entre las personas de edad avanzada.
El estudio se llevó a cabo en el Hospital de la Universidad de Kansas, y los investigadores afirman que el yoga no sólo reduce los latidos irregulares en el corazón, también ayuda a reducir la ansiedad y los síntomas de depresión.
Estos hallazgos son importantes porque muchas de las estrategias actuales de tratamiento para la fibrilación auricular, incluyen procedimientos invasivos o medicamentos con efectos secundarios no deseados.
El equipo encontró que practicar yoga regularmente reducía hasta en un cincuenta por ciento los episodios de fibrilación auricular, sin mencionar la disminución de la ansiedad, la depresión y el estrés. Mientras que la salud general, el vigor, el funcionamiento social y sobre todo la salud mental, se beneficiaron considerablemente.
Nuestro corazón tiene cuatro cámaras, dos aurículas superiores y dos ventrículos inferiores. Durante un episodio de fibrilación auricular, las aurículas no están sincronizadas con las contracciones de los dos ventrículos. El corazón, en efecto, late demasiado rápido, irregularmente y de forma ineficaz. Esto afecta el flujo de sangre enviado al cuerpo, provocando que la sangre comience a acumularse en las aurículas, aumentando el riesgo de formar coágulos. Estos coágulos pueden viajar al cerebro y provocar apoplejías.
A pesar de que el estudio contó con menos de cincuenta participantes y serán necesarias investigaciones más amplias al respecto, el yoga podría ser un tratamiento complementario de bajo costo para éste y otros problemas que involucran el ritmo cardíaco.
