La palabra fibromialgia proviene del griego myos, que significa músculo y de algos, que significa dolor. Este padecimiento es un síndrome común de dolor crónico generalizado en los tejidos blandos, acompañado de debilidad, fatiga y trastornos del sueño. Por desgracia, aún se desconoce la causa de este mal.
Cuando una enfermedad o condición de salud es crónica, significa que es de larga duración.
A pesar de que la fibromialgia se vincula con otra condición como la artritis, lo cierto es que no causa daño a las articulaciones ni produce inflamación como la artritis lo hace. La fibromialgia tampoco causa daños en los músculos y otros tejidos.
Sin embargo es muy similar a la artritis debido a que provoca un dolor severo, sin mencionar que el cansancio puede minar la capacidad del paciente para realizar sus actividades diarias. La fibromialgia se considera como una condición reumática.
Una condición reumática causa dolor en las articulaciones y los tejidos blandos.
Algunos de sus signos y síntomas incluyen la rigidez matutina, dolores de cabeza, patrones de sueño irregulares, síndrome del intestino irritable, periodos menstruales dolorosos, hormigueo en manos y pies, síndrome de piernas inquietas, sensibilidad al frío o al calor y problemas cognitivos o de memoria.
