Algunos hallazgos apuntan a un posible papel de la ‘miel de Manuka‘, en la prevención de la dermatitis inducida por la radiación clínicamente significativa en pacientes con cáncer de mama. Además de que puede disminuir la duración de los episodios de dermatitis.
Como parte de una investigación en Nueva Zelanda, el estudio fue presentado posteriormente en el Congreso Europeo Multidisciplinario contra el Cáncer. Para llevarlo a cabo, se asignaron al azar entre ochenta y un pacientes, una crema acuosa estándar o miel de Manuka, para que fuera aplicada durante una serie tratamientos de radioterapia.
El estudio incluyó a mujeres con cáncer de mama invasivo o carcinoma ductal in situ, que fueron sometidas a radioterapia externa adyuvante. La formulación de la miel utilizada era un producto esterilizado y puro, con miel de Manuka activa como el único ingrediente.
La dermatitis por radiación es un efecto secundario común en pacientes sometidos a la irradiación de la mama y/o pared torácica, las primeras reacciones suelen reportarse después de la segunda aplicación del tratamiento, al menos entre el treinta y el cincuenta por ciento de los pacientes. La dermatitis es una respuesta inflamatoria aguda, que tiene su origen en muchas causas, especialmente en los niveles elevados de especies oxidativas reactivas.
La miel de Manuka es una miel monofloral hecha por abejas de Nueva Zelanda que frecuentan el arbusto del mismo nombre. Es conocida por sus propiedades antiinflamatorias, por ayudar a la cicatrización de las heridas, por ser útil para la curación de la descamación húmeda y para aliviar la mucositis inducida por radiación.
Los resultados fueron prometedores, tanto visual como físicamente, ya que se redujo la incidencia de la dermatitis hasta en un cincuenta y siete por ciento en los pacientes que usaron la miel, en comparación con los que recibieron la crema acuosa. Se espera que el estudio pase a la siguiente fase para examinar más a fondo el potencial de la miel en esta configuración.
