El consumo de frutas y verduras de todo tipo está fuertemente asociado con un menor riesgo de contraer muchos padecimientos adversos para la salud, así como una mejor calidad de vida. El consumo de alimentos de origen vegetal como las peras, disminuye el riesgo de obesidad, diabetes, enfermedades del corazón, mientras ayuda a mantener la piel saludable, brinda un aumento de energía y ayuda a mantener un peso saludable.
Ahora bien, se recomienda que los hombres menores de cincuenta años consuman treinta y ocho gramos de fibra al día, mientras que las mujeres menores de cincuenta años deben consumir veinticinco gramos por día. Para los adultos mayores de cincuenta años de edad, la recomendación en hombres es de treinta gramos por día y para las mujeres es de veintiún gramos por día. Por desgracia, la mayoría de las personas no consumen ni el cincuenta por ciento de la recomendación diaria. Vale la pena mencionar que la fibra puede disminuir el riesgo de enfermedad cardíaca coronaria y diabetes tipo dos.
El tratamiento de la diverticulosis: Las dietas altas en fibra disminuyen la prevalencia en los brotes de la diverticulosis mediante la absorción de agua en el colon y al hacer los movimientos de intestino más suaves y fáciles de efectuar. Además, comer una dieta de frutas y verduras llena de fibra, puede reducir la presión y la inflamación en el colon.
Pérdida de peso: Las frutas y verduras con alto contenido de fibra ayudan a mantener la sensación de saciedad por más tiempo y también son bajas en calorías. Se ha demostrado que el aumento en la ingesta de fibra ayuda a mejorar la pérdida de peso para los individuos obesos.
Enfermedades cardiovasculares y colesterol: El aumento de la ingesta de fibra ayuda a reducir la presión arterial y los niveles de colesterol. Diversos estudios encontraron que incluso una aumento modesto de diez gramos por día en la ingesta de fibra reduce el colesterol malo total.
Diabetes: Una dieta alta en fibra se asocia con un menor riesgo de desarrollar diabetes y mantiene el azúcar en la sangre estable.
Digestión: El contenido de fibra en las peras previene el estreñimiento y promueve la regularidad para un sistema digestivo saludable.
Desintoxicación: Tener movimientos de intestino regulares y adecuados es algo crucial para la excreción diaria de toxinas a través de la bilis y las heces. Las peras son aproximadamente ochenta y cuatro por ciento agua, esto ayuda a mantener las heces fecales suaves y limpiar el sistema digestivo de toxinas.
