Un informe publicado por el Foro de Infantes y Niños Pequeños, resalta la necesidad de la concepción y el embarazo a ser vistos como una “ventana de oportunidad” fundamental para mejorar la salud de la próxima generación.
Dicho de otro modo, con el respaldo de las autoridades nutricionales se reconoció que el peso de la madre y el estado nutricional antes, durante y entre embarazos puede tener un efecto duradero en la salud de los hijos y el riesgo de contraer enfermedades en el futuro. De hecho un buen estado nutricional en las mujeres embarazadas podría conducir a mejorar la salud en las generaciones futuras.
El informe señala que el setenta y dos por ciento de los profesionales de la salud considera importante la nutrición previa a la concepción y el embarazo, pero un tercio de ellos no ha tenido formación en el área. Sólo cuatro de cada diez profesionales de la salud siempre dan consejos sobre nutrición y ejercicio para mujeres embarazadas. Mientras que una tercera parte de los profesionales dicen que explicar los riesgos asociados a la obesidad para las mujeres embarazadas es un gran desafío que enfrentan, sin mencionar que la falta de tiempo en las consultas es el obstáculo más grande.
Una orientación clara en el embarazo y antes de la concepción debe ser el nuevo enfoque
A pesar de que los primeros años de vida son fundamentales para influir en los resultados de salud en la edad adulta, la obesidad sigue siendo un importante problema de salud pública que continúa amenazando la la salud de las personas más jóvenes.
En respuesta a los resultados, la ITF está ampliando su margen de competencias educativas para adoptar un enfoque saludable en el embarazo, la lactancia y hasta la niñez temprana. El objetivo del ITF es apoyar y potenciar a los profesionales de la salud para ayudar a las familias a tomar decisiones de vida saludables mediante la entrega, consejos prácticos y claros.
