Las moras azules o arándanos azules son una de las delicias de verano más populares de todos los tiempos. Son dulces, suculentas, llenas de nutrientes y pueden ser consumidas justo después de adquirirlas en nuestra tienda de confianza. Sin mencionar que pueden incorporarse en una gran variedad de recetas.
Las moras azules contienen un tipo de flavonoide conocido como antocianinas, el cual es responsable de dar a los alimentos como los arándanos, la col roja y la berenjena sus profundos matices rojos, púrpuras y azules tan distintivos. Sin embargo, las antocianinas hacen mucho más que darles un color bonito, también contribuyen a numerosos beneficios para la salud que las frutas nos brindan.
Una mora azul fresca contiene ochenta y cuatro calorías, cero gramos de colesterol, uno punto un gramos de proteína, cero punto cuarenta y nueve gramos de grasa, veintiún gramos de hidratos de carbono y tres punto seis gramos de fibra dietética (equivalente al catorce por ciento de las necesidades diarias).
De la misma forma, una taza ofrece el veinticuatro por ciento de las necesidades diarias de vitamina C, cinco por ciento de vitamina B6 y el treinta y seis por ciento de las necesidades de vitamina K. Los arándanos azules también proporcionan hierro, calcio, potasio, magnesio, fósforo, sodio, manganeso, zinc, cobre, ácido fólico, beta-caroteno, ácido fólico, colina, vitamina A y vitamina E.
Además de antocianinas, las moras azules contienen una amplia gama de compuestos fenólicos, tales como la quercetina, el kaempferol, la miricetina y el ácido clorogénico, los cuales brindan a los arándanos sus capacidades antioxidantes.
