El aceite de oliva es considerado universalmente como una alternativa mucho más saludable que la grasa animal. Los aceites vegetales derivados (como el aceite de oliva, aceite de canola y aceite vegetal) consisten principalmente en ácidos grasos insaturados, mientras que la grasa animal es más rica en grasas saturadas. Después de una comida típica, los carbohidratos son la principal fuente de producción de energía en el corazón. En condiciones de ayuno, sin embargo, los ácidos grasos libres se convierten en el principal productor de energía. No obstante, se sabe que la grasa saturada en la dieta es perjudicial para la salud del corazón, pero su impacto en el músculo cardíaco se ha estudiado recientemente.
Curiosamente, mientras que los ácidos grasos saturados son tóxicos para las células, los ácidos grasos insaturados no sólo son inofensivos, sino que también proporcionan protección contra el daño causado por los ácidos grasos saturados. Los estudios realizados en muchas líneas celulares han indicado que los ácidos grasos saturados pueden causar la muerte celular envolviendo al “estrés del retículo endoplasmático”, un proceso celular conocido por estar involucrado en el desarrollo de muchas enfermedades.
El presente estudio, muestra que hay grandes diferencias en la acumulación de ácidos grasos saturados e insaturados en las células del músculo cardíaco, y que los ácidos grasos saturados inducen la muerte de estas células por el estrés del retículo endoplásmico. En contraste, los ácidos grasos insaturados protegen a las mismas células de dichos daños.
Un grupo de investigación del Instituto del Corazón de Montreal, en Canadá, evaluó el impacto del palmitato y oleato en la absorción celular de ácidos grasos, la síntesis de triglicéridos, la distribución intracelular de lípidos, el estrés del retículo endoplásmico, y la muerte celular en cardiomiocitos primarios. Esta es la primera vez que se observaron estos fenómenos en las células derivadas directamente desde el corazón, el hallazgo podría sugerir un probable papel de los ácidos grasos saturados en el desarrollo de enfermedades del corazón entre pacientes diabéticos. Tomando como base estos resultado y los de futuras investigaciones en esta dirección, podría mejorar nuestro entendimiento sobre la posible conexión entre la acumulación de lípidos y el desarrollo de miocardiopatía diabética.
