La vitamina B12 está encargada de regular el comportamiento de los genes en las bacterias faciales de algunas personas que normalmente disfrutan de piel clara. Esto es importante porque los cambios en la actividad de las bacterias faciales promueven la inflamación y conducen a las espinillas.
Al arrojar luz sobre uno de los mecanismos detrás del papel de la vitamina B12 en el acné, el hallazgo de la Universidad de California en Los Ángeles, puede identificar objetivos farmacológicos que den lugar a nuevos tratamientos para combatir el acné.
La investigación fue apoyada por el Instituto Nacional de Ciencias Médicas Generales y el Instituto Nacional de Artritis y Enfermedades Musculoesqueléticas y de la Piel.
La investigación de la Universidad de California (UCLA) se inició como parte del Proyecto Microbioma Humano. Lanzado por los Institutos Nacionales de Salud en 2007, el proyecto tiene como objetivo identificar y comprender mejor los microorganismos que viven en y sobre nuestros cuerpos y que mantienen la salud humana o conducen a la enfermedad.
