De acuerdo con un artículo publicado en la Revista de Metabolismo Celular, las dietas ricas en aceite de pescado en comparación con las dietas ricas en grasa de cerdo, producen bacterias muy diferentes en los intestinos de los ratones. En adición, los investigadores transfirieron estos microbios en otros ratones para ver cómo afectaban su salud, y los resultados sugieren que las bacterias intestinales comparten parte de la responsabilidad de los efectos benéficos del aceite de pescado y los efectos nocivos de la manteca de cerdo.
En particular, los ratones que recibieron un trasplante de microbios intestinales basados en una dieta de aceite de pescado estaban protegidos contra el aumento de peso corporal inducido por la dieta y la inflamación, en comparación con los ratones que recibieron microbios intestinales provenientes de una dieta de manteca de cerdo. Esto demuestra que los microbios intestinales son un factor agravante de la inflamación (independiente a la obesidad inducida por la dieta) y da esperanzas de que un probiótico podría ayudar a contrarrestar una dieta “grasa”.
Los científicos comenzaron alimentando a un grupo de ratones ya fuera con manteca de cerdo o aceite de pescado durante un periodo de once semanas, al tiempo que monitoreaban sus signos de la salud metabólica. Mientras que el consumo de manteca de cerdo promovió el crecimiento de bacterias llamadas Bilophila, las cuales están vinculadas con la inflamación intestinal, la dieta de aceite de pescado aumentó la abundancia de bacterias llamadas Akkermansia muciniphila, conocidas por reducir la ganancia de peso y mejorar el metabolismo de la glucosa en ratones.
La siguiente fase, fue llevar a cabo “trasplantes fecales” para probar si los microbios del aceite de pescado podrían mejorar la salud de los ratones alimentados sólo con manteca de cerdo, y viceversa. Al final, los investigadores creen que los resultados proporcionaron evidencia adicional de que las comunidades microbianas del intestino pueden determinar los problemas de salud causados por la mala alimentación.
