En los últimos diez años, han existido docenas de estudios sobre los aceites de pescado y los aceites omega 3. Algunos respaldan sus posibles beneficios para la salud, mientras que otros no.
Se dice que los aceites de pescado son benéficos si se incluyen en la dieta humana. A continuación mencionaremos algunos de esos beneficios:
Esclerosis múltiple: Se que el aceite de pescado ayuda a las personas que padecen esclerosis múltiple. Sin embargo, un estudio realizado por investigadores del Hospital de la Universidad de Bergen, Noruega, en abril de 2012, encontró que los ácidos grasos omega 3 no ayudan a las personas con este padecimiento.
Cáncer de próstata: Un estudio reveló que los aceites de pescado reducen el riesgo de desarrollar cáncer de próstata si se sigue una dieta baja en grasas, mientras que otro estudio publicado en el diario del Instituto Nacional del Cáncer, en Estados Unidos, encontró un vínculo entre los altos niveles de omega 3 y riesgo mayor de hasta setenta por ciento, de desarrollar un cáncer de próstata agresivo.
Depresión postparto: Un estudio de la Escuela de Enfermería de Connecticut, reveló que los aceites de pescado protegen de la depresión postparto, especialmente si se consumen durante el embarazo.
Beneficios en la memoria: La memoria de trabajo, puede mejorar en los adultos jóvenes sanos, si aumentan su ingesta de ácidos grasos omega 3, según un informe de la revista PLOS One.
Protección contra la pérdida de visión: Los investigadores de una revista canadiense, llamada Oftalmología y Ciencia Visual, dijeron que el consumo adecuado de DHA (ácido docosahexanoico) protege a las personas de la pérdida de visión relacionada con la edad.
Beneficios para el feto: Científicos de la Universidad Laval, encontraron que el consumo de omega 3 durante los últimos tres meses de embarazo, aumenta el desarrollo cognitivo y motriz del feto y futuro bebé.
