Un nuevo estudio realizado en el Instituto Statens Serum de Copenhague, en Dinamarca, sugiere que el uso de medicamentos antimicóticos como el fluconazol, puede aumentar el riesgo de aborto espontáneo.
Las mujeres embarazadas tienen un mayor riesgo de desarrollar candidiasis -la infección vaginal provocada por levaduras- debido a un aumento en la secreción de las hormonas sexuales. Tan sólo en Estados Unidos, alrededor del diez por ciento de las mujeres embarazadas desarrollan la enfermedad.
Ahora bien, aunque el tratamiento de primera línea suelen ser formulaciones intravaginales de antifúngicos tópicos, en el caso de las mujeres embarazadas, a menudo se utiliza el fluconazol oral.
Sin embargo, hay una falta de información de seguridad para el medicamento. Además, algunos estudios previos han relacionado a las mujeres tratadas a largo plazo con altas dosis de fluconazol durante el embarazo, con un patrón distinto de defectos congénitos craneofaciales y esqueléticos en sus bebés.
Para el presente estudio, el equipo de investigación evaluó la asociación entre la exposición al fluconazol oral durante el embarazo, con el riesgo de aborto espontáneo y muerte fetal. Sus resultados mostraron un aumento significativo entre el riesgo de aborto espontáneo asociado al fluconazol, sin embargo, los investigadores señalan que, dado que el número de nacidos muertos fue bajo en general, se necesita de más información para sacar conclusiones definitivas sobre el riesgo.
Un factor de confusión posible, podría ser que en los casos más severos de candidiasis vaginal, la cándida puede ascender desde la vagina y causar candidiasis intrauterina, una condición que puede conducir a la prematuridad y la pérdida fetal.
