Por primera vez, un grupo de investigadores del Centro Fred Hutchinson de Investigación del Cáncer, ha descubierto que la pérdida de peso, en combinación con la administración de suplementos de vitamina D, tiene un mayor efecto en la reducción de la inflamación crónica que la pérdida de peso por sí sola. Esto es relevante, ya que es bien sabido que la inflamación crónica contribuye al desarrollo y la progresión de varias enfermedades; incluyendo algunos tipos de cáncer.
Los científicos indican que debido a sus anteriores estudios se sabe que al perder peso, las personas pueden reducir sus niveles generales de inflamación, y hay cierta evidencia que sugiere que tomar suplementos de vitamina D puede tener un efecto similar. Sin embargo, no se sabía si la combinación de los dos, (la pérdida de peso y la vitamina D) impulsarían aún más este efecto.
Para explorar esta cuestión, los científicos reclutaron a doscientas dieciocho mujeres sanas con sobrepeso, que tenían niveles bajos de vitamina D. Posteriormente, las mujeres participaron en una dieta de doce meses y un programa de ejercicios. La mitad de los participantes en el estudio fueron seleccionados al azar para recibir dos mil unidades internacionales de vitamina D al día, durante un año. Por otro lado, la otra mitad recibió un placebo de apariencia idéntica. Los niveles de inflamación se midieron al principio y al final del estudio. Luego, los investigadores compararon los cambios en estos niveles entre los dos grupos.
Al final del estudio, todos los participantes habían reducido los niveles de inflamación, independientemente de si tomaron la vitamina D. Sin embargo, los que se vieron más beneficiados fueron los que consumieron el suplemento con esta vitamina.
La vitamina D es una hormona esteroide, que tiene varias funciones más allá de su papel ampliamente reconocido en la regulación de los niveles de calcio y el metabolismo óseo. Se pueden encontrar receptores de vitamina D en más de treinta tipos de células.
Dado que la inflamación crónica es un padecimiento pro-tumorigénico, de ahí la importancia en la reducción del peso; dicho de otro modo: si el mantener un nivel adecuado de vitamina D puede disminuir la inflamación por encima de la de la pérdida de peso, esto podría ser una importante adición a las herramientas actuales para reducir el riesgo de padecer ciertos tipos de cáncer.
